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Posada Valle de Guriezo

Inicio : Valle de Guriezo

El río Agüera vertebra el valle de Guriezo humedeciendo sus fértiles tierras, donde prosperan huertos y frutales. Este hermoso río truchero, que fué frontera natural de las valerosas tribus cántabras, vierte sus aguas en el mar Cantábrico, conformando un amplio estuario donde la fina arena reposa en playas salvajes muy frecuentadas en la época estival.

La historia de Guriezo ha sido marcada por la industria del hierro, encontrándose las ferrerías mas antiguas de la costa cantábrica a lo largo del Agüera. Estas fundiciones utilizaban carbón vegetal que se obtenia en los bosques del Remendón donde aún se encuentran vestigios de las carboneras. Es digna de mención la Ferrería de La Yseca que se remonta al siglo XIII.

Paseando por el valle y las montañas de Guriezo descubriremos rincones por los que el tiempo parece no haber pasado. Viejos bosques de robles y encinas envuelven los arroyos de montaña que sirven de refugio a la fauna salvaje que comparte hábitat con las vacas monchinas, el ganado autóctono.


Historia y Arte

Las riquezas de la comarca han atraído al hombre desde la prehistoria, cómo lo prueban restos arqueológicos diseminados a lo largo del valle. Los cordales de las montañas fueron lugares de culto donde se sitúan dólmenes y menhires que superan los 2.500 años de antigüedad.

En las numerosas cuevas del municipio se han encontrado restos prehistóricos de gran interés, cómo los descubiertos en la de la Cervajera. La cueva de los Tocinos, cercana al alto de Hoyomenor, es quizás la cavidad más emblemática de Guriezo debido a sus numerosas galerías de singular belleza.

Entre las iglesias guriezanas, la más representativa aparece sobre un promontorio cubierto de un exhuberante encinar relicto que rodea el templo. San Vicente de la Maza, de los siglos XVI al XVII, fué sede del Cabildo eclesiástico del valle.

En el monte de las Nieves, que se divisa desde cualquier parte de Guriezo, se asienta una pequeña ermita advocada a la Virgen. Desde hace muchos siglos los guriezanos ascienden a la montaña para celebrar el 5 de Agosto una romería en honor a su patrona.

El Camino de Santiago en su ruta de la costa pasa por Guriezo. En el retablo mayor de la Iglesia de San Vicente de la Maza tenemos una bella representación de Santiago peregrino postrado ante la Virgen. En el barrio de Rioseco, en el que se ubica la Posada Valle de Guriezo, existía un hospital de peregrinos actualmente desaparecido.

Las casonas más representativas son la llamada Casa Pinta, también en Rioseco y muy cerca de la iglesia, con dos torres angulares de dos pisos y zaguán de arcos escarzanos y el palacio Marroquín, con torre cilíndrica tipo castillete. Las fachadas van casi siempre acompañadas por escudos de las familias.